viernes, 29 de abril de 2011

historia de kabbalah

La sabiduría de la Cabalá se reveló gracias a Adám (“el primer hombre”) hace 5.770 años. El escribió un libro sobre el tema titulado Raziel HaMaláj (El ángel Raziel). Esta enseñanza continuó a través de sus estudiantes, y veinte generaciones más tarde, llegó a Abraham, un sabio que vivía en la antigua Babilonia.

Abraham adoraba estrellas, espíritus, y árboles y hacía ídolos hasta que la sabiduría de la Cabalá fue revelada a él en forma global. Él escribió sobre esto en el Séfer Ietzirá (El Libro de la Creación).

Abraham condujo a sus discípulos a salir de Babilonia y a entrar en la tierra de Canaán. Organizó un grupo de cabalistas con ellos, que se prolongó hasta la caída misma del Templo. Todos ellos vivían entre sí como una sociedad global, integral, como un hombre con un corazón. Sin embargo, hace 2.000 años, en el momento de la caída del Templo, ellos cayeron del amor fraternal al odio infundado.

Este evento fue lo que llamamos la “caída”, puesto que se cayeron del mundo global a nuestro egoísmo humano. Así perdieron ellos la sensación del mundo espiritual, la dimensión superior, y empezaron a sentirse como todos lo hacemos ahora, es decir como si existiéramos sólo en nuestro mundo, cada uno por separado, de manera egoísta.

En vez de la sabiduría de la Cabalá y de la vida en el sistema colectivo, integral, ellos comenzaron a experimentar sólo nuestro mundo, como lo hace la gente hoy en día. En ese momento, la Cabalá, que es la sabiduría, el alcance, el conocimiento y la ciencia espiritual, fue reemplazada por la religión, la fe religiosa. Después de todo, el mundo espiritual desapareció de su vista.

Esta es la forma en la que existimos hasta este día. Religiones tales como el judaísmo surgieron, y esta dio origen al cristianismo, seguida por el Islam. Todas estas religiones existen porque lo espiritual, global e integral del mundo está oculto de nosotros.

Sin embargo, mientras se desarrolla, no habrá lugar para las religiones. Se convertirán en las tradiciones culturales de una nación. Por eso hay tal resistencia entre la Cabalá y el judaísmo, la cual ha continuado durante los últimos 2.000 años.

La gente religiosa odia la Cabalá, porque esta les explica que ellos viven en la oscuridad y no entienden dónde están y qué están haciendo. Sin embargo, llegará un tiempo, y especialmente en nuestros días, en el cual tendrán que elevarse desde el nivel de la fe ciega al nivel del conocimiento espiritual.

M. LAITMAN

miércoles, 27 de abril de 2011

LA ACTITUD ANTE EL CREADOR.

Nuestro principal problema es establecer nuestra actitud hacia el Creador. Claramente, es subjetiva y depende enteramente de nosotros, de cómo pensamos y sentimos. No cambia dependiendo de la actitud del Creador, la cual nos es desconocida, sino que es determinada mediante lo que pensamos de Él.

Por una parte, hablamos de la naturaleza, del entorno en el que nos desarrollamos. Alguna vez el hombre comenzó a revelar la naturaleza, ascendiendo así en nuestro mundo del nivel animado al nivel humano al investigar la naturaleza a su alrededor. Tras eso comenzó a investigar el mundo espiritual, una vez que su deseo creció hasta ese nivel. Así, al grado en que su deseo creció, la persona se adentró cada vez más profundo en la naturaleza.

Sin embargo, la persona consiste de dos partes: una siente y otra entiende, y las dos tienen una conexión específica e influencia mutua. Precisamente a través de ellas, sentimiento y razón, o corazón y mente, él investiga lo que siente. Cualquier cosa que no entre a sus sentidos permanece desconocida para él. Él investiga sólo sus impresiones, mientras que las cosas que son inaccesibles a las sensaciones propias, no pueden ser discutidas para nada porque serían filosofía vacía y fantasía.

Por lo tanto, nuestras ideas del Creador no están basadas en cómo es Él en realidad, sino en cómo Lo percibimos ¡Nunca sabremos quién es Él realmente! Sólo sabemos que existe una fuerza externa, superior que es percibida como la naturaleza a nuestro alrededor.

Sus partes más cercanas las llamamos “este mundo”. Pero existe una naturaleza más grande que se revela a la persona cuando se somete a un desarrollo especial. Esta es llamada naturaleza superior. Pero, nadie sabe quién es el Creador en sí.

Por lo tanto, la ciencia de la Cabalá habla acerca de todo en relación con el hombre. Está escrito, “¡No existe nadie más que Él!” Es decir cómo siente una persona y qué discierne como resultado de su investigación.

Los cabalistas nos hablan acerca de sus impresiones de esta fuerza superior única, y resulta que el Creador parece enojarse mucho, o estar feliz, o disfrutar algo. Pero esta es la manera cómo lo siente la persona ¡Así es como él siente la fuerza superior! Sin embargo, no sabemos lo que realmente le sucede.

No obstante, es muy importante para nosotros establecer nuestra actitud hacia la fuerza superior para saber de dónde viene esta forma, imagen, impresión, o sensación, la cual recibimos de Él. A quién sentimos: ¿a Él o a nosotros? O ¿nos percibimos en contraste con Su Luz? O ¿sentimos algo que nos es común a ambos, alguna interacción entre nosotros? ¡Eso es algo que tengo que saber!

Cuando me siento bien o mal, De quién depende esta sensación, ¿de mí, o viene del Creador? O ¿tal vez depende de nuestra mutua similitud, o de alguna conexión especial?

Si llevo a cabo cualquier acción, ya sea en palabras, pensamientos, o físicamente, ¿está Él forzándome a actuar de esa manera o tengo algún tipo de libertad? ¿Pero cómo puedo tener esa libertad si soy un resultado, un producto de Su trabajo?

Es decir, debemos de alguna manera definirnos en relación con nuestra conexión con el Creador. De otra manera nos confundiremos constantemente. Esto tiene una gran importancia para nuestra actitud, nuestro trabajo interno, y nuestra conexión con Él. Esto también se refleja en todas nuestras relaciones, dentro de la familia y cuando una persona está frente a frente consigo mismo.

Por lo tanto, esta no es una pregunta abstracta para nosotros. Establecer nuestro estado, conexión, y actitud hacia el Creador influye en todos los niveles de nuestra vida. Esto es lo más fundamental que hay. Por eso la opinión de Baál HaSulám es muy importante para nosotros a este respecto, lo que establece en el artículo, “No existe nadie más que Él”, el primer artículo en el libro Shamati.

M. LAITMAN

domingo, 24 de abril de 2011

LA FISICA ESPIRITUAL

Todo el desarrollo sucede de acuerdo con los cuatro estados de HaVaYáH que surgen de la combinación de dos cualidades, del deseo de recibir placer y del deseo de otorgar, que empiezan a conectarse entre sí. Al principio, el deseo de recibir prevalece. Luego lo hace el deseo de otorgar. Después, trabajan juntos, y todo culmina con el grado final de Máljut que desea gobernar sobre todos con su deseo egoísta.

Por esta razón, cuando la Luz influye en el deseo, hace que se desarrolle de acuerdo con los cuatro estados hasta el estado de Dálet (Cuatro). Esta es la ley de la física espiritual. Esto da como resultado el desarrollo de acuerdo con los niveles inanimado, vegetativo, animado, y humano. El hombre mismo, también se desarrolla de acuerdo con los mismos cuatro niveles: inanimado, vegetativo, animado y humano en su interior.

Por eso necesitamos entrar en un estado cada vez, estar en él, y sentir sus defectos. Nosotros nos “guisamos” en un cierto grado de desarrollo hasta que comprendemos sus deficiencias y comenzamos a buscar el nuevo grado. Todo esto sucede de acuerdo con la ley de los cuatro estados del desarrollo, según la cual cada grado actual contiene siempre el lado opuesto del grado siguiente, que nos atrae.

Esta es la razón por la que inicialmente disfrutamos de cada nuevo estado alcanzado, pero luego empezamos a sentir que este estado es nuestro “exilio“. Este empieza a sentirse malo e insuficiente. De esta manera, carecemos de la vida “vegetativa” en el nivel “inanimado”, de la vida “animada” en el nivel vegetativo, y de la vida “humana” en el nivel animado. Sin embargo, ¿De qué carecemos en el nivel humano? ¡Carecemos del Creador!

Atravesamos estos cuatro estados de esta manera, los cuales se conocen como los cuatro exilios. Cada vez que sentimos que estamos en el exilio, queremos salir de este estado. Cada vez que ya no somos capaces de permanecer en un estado determinado porque la sensación de carencia se vuelve intolerable, vamos a un nuevo estado, y esta transición se llama “la redención”.

En resumen, hay cuatro exilios y cuatro redenciones. Hasta hoy, hemos atravesado cuatro exilios y tres redenciones en el transcurso de la historia de la humanidad, y estamos en el umbral de la liberación cuarta y última.

En nuestro estado actual, lo tenemos todo, excepto al Creador, la sensación y la conexión con Él para así poder sentir Su cualidad: otorgamiento y amor a los demás. Cuando una persona carece específicamente de esto, significa que ha alcanzado el cuarto y último estado, la sensación de carencia de la revelación del Creador.

No hay carencia mayor, esta es la carencia final. Esta es la carencia que necesitamos alcanzar con nuestros esfuerzos, ejercicios y trabajo mutuo. El hombre debe verificar si esto es realmente de lo que carece. Si no, todavía no se ha acercado a la liberación. Sin embargo, si tiene un entorno fuerte que tenga derecho a salir del exilio hacia la redención, es posible que ellos puedan sacarlo del exilio cuando salgan, puesto que deben llevar a un anciano, una mujer o un niño.

Los primeros en salir son los hombres (Gvarím), aquellos que son capaces de superarlo (Midgabrím). Ellos los jalan a todos, ayudan y guían de alguna manera. Los demás sólo tienen que estar listos para unirse con ellos, no para resistirse, teniendo el deseo de salir aunque sean débiles y carezcan de la fuerza necesaria para unirse. Sin embargo, no deben estar en su contra.

En otras palabras, necesitamos alcanzar un estado en el que sentiremos específicamente la carencia del atributo de otorgamiento y amor, de unidad, de garantía mutua. Este estado precede al nacimiento espiritual.
M.LAITMAN

miércoles, 20 de abril de 2011

NUESTRA NATURALEZA

En nuestro mundo lo único que sabemos hacer es recibir. Por lo tanto, sin la ciencia de la Cabalá el mundo resbalaría hacia la autodestrucción. Si no fuera por las nociones del Creador y la creación extraídas de la Cabalá, si no fuera por la oportunidad de atraer la Luz superior, la fuerza que nos corrige, si sólo existiera este mundo frente a nosotros, sólo la tierra rotando en el espacio y nosotros en su superficie manejados por la naturaleza, entonces exterminaríamos la vida aquí en las próximas dos décadas. Esto está confirmado por la investigación científica, en la cual definitivamente se puede confiar. Los recursos de la tierra son limitados, y después de habernos comido todo, moriríamos de inanición.

En nuestro mundo no hay solución para este proceso. Estamos deliberadamente siendo llevados a un estado irreversible en el que no nos quedará ningún medio de salvación. El propósito es revelar nuestro Faraón, nuestro egoísmo, que nos destruye y no nos permite hacer nada. Como resultado de este proceso, toda la humanidad tiene que sentir una necesidad por el Creador.

La investigación nos muestra que en los próximos años el mundo enfrentará una carencia extremadamente cruel de agua limpia y otros recursos necesarios. En teoría, para el final de este siglo terminaremos con lo que queda y tendremos muchas posibilidades de morir. Y no hay solución. Las mentes más brillantes del mundo no pueden encontrarla. Pero son tan listos que pueden ver una línea final de la cual no hay escapatoria.

Y en realidad, ¿Cómo podemos salir de ello? No tenemos oportunidad en cuanto a restringir nuestras inclinaciones malvadas. No puedes aconsejarle a las personas consumir menos debido a la falta de otra opción. Si cada uno comienza a recibir el ingreso mínimo y no más que eso, entonces a partir de mañana nadie va a ser capaz de moverse ¿Y cuál sería el punto de eso? Es exactamente lo que sucedió en Rusia tras la revolución. Si la motivación desaparece, el mundo se congelaría. Incluso si entregas medallas por el trabajo desinteresado, no ayudaría.

Tengo que sentir que otra persona es inferior a mí de alguna manera, que he ganado más o he alcanzado algo más grande. Si no tengo esto, ¿Entonces qué compensación puedes ofrecerme? Si mi vecino recibe 5000 dólares, entonces yo necesito al menos 5001. Pero si todo es igual, entonces la persona simplemente no puede vivir de esa manera.

Es por eso que hoy enfrentamos un problema que no tiene solución en nuestro mundo. Somos incapaces de lograr el equilibrio con la naturaleza. Eventualmente todos entenderemos qué es un mundo global, integral y qué es la homeostasis. Hay muchas películas e investigación en este tópico y todas hablan de que debemos practicar la moderación. El único problema es que no somos capaces de contenernos.

El Faraón surge de las sombras dentro de nosotros, obstruyendo todos nuestros intentos de moderar nuestro apetito. Pronto esto saldrá a la superficie: Las personas se observarán, viendo como son impotentes, caminando hacia la muerte sin ser capaces de parar. Baál HaSulám describe esto mediante una alegoría: El ángel de la muerte te trae una gota de veneno en la punta de una espada y tú abres la boca para tragarla y morir. Eres incapaz de vencerte a ti mismo y esperas esta gota final.

Es por eso que la diseminación de la ciencia de la Cabalá es necesaria. Se necesita un grupo ejemplar, capaz de mostrarle al mundo la verdadera solución. Este grupo tiene que convertirse en “una Luz para las naciones” y desde arriba derramar sobre ellos la sensación y mente espirituales. De otra manera el mundo no tiene oportunidad.

Similarmente, en nuestro caso particular tampoco hay oportunidad. La diferencia es que nosotros mismos queremos sentir este estado definitivo porque sabemos que después de eso la Luz superior nos será revelada, siendo esta una nueva fuerza, la fuerza de otorgamiento que tirará de nosotros hasta un nivel diferente. Y debemos hacer lo mismo por el mundo incluso cuando las personas no son capaces de aspirar a esto antes de tiempo.

M. LAITMAN

No hay diferncia entre hombre y mujer en el trabajo espiritual

No hay diferencia alguna en el trabajo de un hombre y una mujer, porque ambos son deseos de recibir placer, ambos son egoístas. Cada uno de ellos tiene que elevar la importancia de la meta, es decir, la revelación de la fuerza superior y su conexión con todas las personas, para revelar el mundo espiritual.

Al sentir la importancia de la meta, anulo mi ego y rechazo varias cosas que aparecen como obstáculos para alcanzarla. No dejo de recibir placer de la comida o de la vida, no rechazo nada en este mundo, pero trabajo sólo en la importancia de la meta.

Decimos que nuestro mundo es importante para nosotros y está lleno de grandes placeres, pero el mundo espiritual es aún más importante y más atractivo para mí. Resulta que, de acuerdo con el grado de esta importancia, no me doy cuenta aparentemente de todo lo que me impide alcanzar la espiritualidad. De esta manera avanzo.

M. LAITMAN

viernes, 15 de abril de 2011

egoismo

A lo largo de todo el camino espiritual, nuestra vara constantemente se convierte en una serpiente y se convierte de nuevo en una vara que nos sostiene en el camino espiritual. Es decir, caminamos por debajo de la razón, en la razón, o por la fe por encima de la razón.

Cuando asciendes de nuevo, después de haber caído y de haber comenzado a juzgar lo que es bueno para ti con tu mente, tienes que tener cuidado para que el retorno a la fe por encima de la razón no sea una decisión egoísta que la mente te obliga a tomar. De lo contrario, dará como resultado que estás caminando por la fe debajo de la razón en lugar de por encima de ella, y que tu fe, la cual está dentro de la razón, desciende aún más bajo.

Se trata de un discernimiento muy fino y agudo que pincha nuestro corazón. Tenemos que ser capaces de ver la verdad ante nuestros ojos por lo que el Creador no podrán engañarnos y obligarnos a caer. Después de todo, tenemos que coger esta “serpiente” por la cola y recogerla del suelo para que se convierta en una vara de nuevo, en vez de caer bajo el peso de estos estados, bajo el peso de esta serpiente.

Toma tiempo que una persona forme estos conceptos en el interior y que comience a entender si él está en este trabajo o no, si hace estos discernimientos. Trabajar con la “vara y la serpiente” ya es trabajar con tu egoísmo, es cuando la persona está entre estas dos fuerzas que influyen en ella, el Faraón y el Creador.
ML.

jueves, 14 de abril de 2011

el mundo espiritual

El mundo espiritual es un mundo de fuerzas que actúan siguiendo leyes, algunas de las cuales comprendemos, mientras que algunos aspectos de ellas siguen siendo desconocidas, lo mismo que las ciencias convencionales que exploran la naturaleza de este mundo. Entendemos algunas partes del mundo espiritual mientras que otras permanecen ocultas

Debemos emplear un enfoque estrictamente científico y serio al investigar la espiritualidad, como lo hacemos al estudiar la naturaleza física. Lo que está oculto ahora, se revelará el día de mañana. La ciencia de la Cabalá nos proporciona los instrumentos de investigación que podrían equipararse a un microscopio dentro de nosotros, que podemos utilizar para estudiar las fuerzas espirituales, las fuerzas de otorgamiento.

Sin embargo, debo tener la fuerza del otorgamiento para medir estas fuerzas, para estudiarlas y discernirlas. El ser humano interpreta todo el conocimiento y las experiencias que recibe a través de él mismo.

Después de que desarrollo mis fuerzas de otorgamiento, las ajusto, como lo haría con un microscopio muy sensible, para penetrar en la profundidad de la materia (el deseo) en donde observo diversos fenómenos (de recepción y otorgamiento), de acuerdo a la sensibilidad de mi vasija de percepción (Kli).

En cualquier ciencia nosotros realizamos la función de un instrumento, porque a final de cuentas, somos nosotros que recibimos el conocimiento y hasta cierto punto lo hacemos subjetivamente. Pero cuando estudiamos la ciencia de la Cabalá lo hacemos conscientemente y nos convertimos en un instrumento de investigación. Sin embargo, el estudio mismo debe ser puramente científico. Nuestra investigación se vuelve objetiva pues nuestra naturaleza nos impulsa a ser objetivos.

En muchas ocasiones los cabalistas dijeron: “Por Tus acciones Te conoceré”. “Conoce a tu Creador y sírvelo”. “Pues todos Me conocerán desde el más pequeño hasta el más grande”.

En todo el universo hay solamente dos fuerzas, dos atributos: la Luz (el atributo de otorgamiento), y el deseo de disfrutar (el atributo de recepción). Todo lo demás se deriva de ellos.

M. LAITMAN.

miércoles, 13 de abril de 2011

Los Cabbalistas

Los cabalistas son científicos que estudian la naturaleza que existe por encima de las limitaciones creadas por nuestro cuerpo físico, es decir por encima de los límites sentidos en nuestro deseo egoísta. En este deseo sentimos una cierta realidad que la llamamos este mundo, en el cual existimos.

Sin embargo, si una persona tiene la oportunidad, la aspiración, y los medios para obtener el deseo de otorgar, por medio de este deseo ella empieza a sentir una nueva realidad, como se dice: “Vi un mundo inverso”. Entonces la persona siente dos realidades: continúa sintiendo el mundo pasado en su deseo de recibir, y percibe un mundo nuevo, adicional, en su deseo de otorgar.

El deseo egoísta tiene un plazo determinado de existencia dentro de la persona, y mientras este está allí, la persona siente vida en este mundo. El deseo experimenta 3 etapas: embrionario, amamantamiento y adultez (Ibúr, Ieniká, Mójin). El deseo crece por medio de estas tres etapas y luego gradualmente despierta, hasta que desaparece completamente.

Estas etapas determinan la sensación de nuestra vida: nacimiento, niñez y adultez. Una persona vive su vida, luego crece y muere. Uno siente la muerte debido a que ya no puede sentir nada en su deseo de recibir.

Sin embargo, la vida dentro del deseo de otorgar no es como la vida corporal, temporal. En esta recibimos una percepción ilimitada de la realidad. No depende de nuestro deseo de otorgar ya que el otorgar está dirigido “hacia el exterior”, a diferencia del deseo egoísta que está dirigido hacia el interior. Es por esto que siempre tenemos la oportunidad de desarrollarnos. Nuestro deseo de otorgar nunca se acaba ni muere debido a que continúa expandiéndose sin ninguna limitación.

Por esta razón, una persona siente la vida eterna dentro del deseo de otorgar. Y debido a que este llenado nunca termina, sino que por el contrario, se agranda, tal existencia se llama eterna y perfecta. Pero con el fin de familiarizarse con este estado, uno debe primero realizar una serie de acciones para adquirir el deseo de otorgar, en donde uno sentirá su vida espiritual.

M.Litman

martes, 12 de abril de 2011

NUESTRO EGOISMO ES UNA HERRAMIENTA.

Nuestro egoísmo es “ayuda a partir de lo opuesto”, la cual tenemos que usar para ascender al nivel del Creador. Y funciona en dos áreas. La primera es la conexión de la persona con el grupo donde su egoísmo trabaja contra “Israel” (la intención “directo al Creador”). La segunda es cuando nuestro ego avanza en contra de la única fuerza que controla el mundo, es decir en contra del Creador. Nuestro ego se levanta en contra de esas dos fuerzas y se resiste a ellas con todos los medios posibles en cada momento. Es por eso que todo nuestro trabajo tiene esto como objetivo.

M. LAITMAN

lunes, 11 de abril de 2011

El hombre ayudará a su prójimo

Debemos entender en qué forma se puede ayudar al amigo. ¿Se puede ayudar cuando hay ricos y pobres, inteligentes y necios, débiles y fuertes? ¿Cómo pueden ayudarse entre ellos cuando todos son inteligentes, ricos y fuertes?
Pero nosotros vemos que hay algo que todos tienen en común, esto es, el estado de ánimo. Está escrito, "La preocupación en el corazón de una persona, debe compartirla con los demás" ya que por lo que respecta a sentirse en un estado de ánimo elevado, en nada le ayudarán las riquezas ni la sabiduría, etc.

Al contrario, una persona puede ayudar a la otra, precisamente cuando ve que ésta se encuentra abatida. Como está escrito, "El hombre no se libera a sí mismo de la cárcel", más bien, es precisamente su amigo el que puede ayudarle a alcanzar un estado de ánimo elevado.

Es así que su amigo lo levanta del estado en que se encuentra y lo conduce a un buen estado de ánimo. Y la persona comienza nuevamente a adquirir confianza y fortuna una vez más en la vida. Y comienza, como si su objetivo estuviese ahora a su alcance.

Resulta, que cada una de las personas tiene que poner atención y pensar en cómo uno puede ayudar a su amigo, levantarle el estado de ánimo. Ya que con respecto al estado de ánimo, cada uno puede encontrar en su amigo alguna necesidad que él puede satisfacer.

BNEI BARUJ

domingo, 10 de abril de 2011

la importancia del ZOHAR

Hay libros escritos por gente común sobre las sensaciones en este mundo. Y hay libros escritos por los cabalistas, las personas que alcanzan el mundo superior y escriben sobre sus sensaciones en la espiritualidad.

Estos son llamados libros especiales, sagrados. Sagrado (Kadósh) traduce literalmente “separado”. El mundo espiritual está completamente separado de nuestro egoísmo, por lo tanto, la persona que está describiendo sus sensaciones, está escribiendo un libro sagrado: especial o separado.

Hay un libro muy especial aparte de los libros escritos a lo largo de la historia por la gente con un alcance espiritual. En las fuentes cabalísticas es simplemente conocido como el Libro, sin mención de su nombre “El Zohar“. Este libro es tan único que, en relación con otros libros ni siquiera es considerado un libro. Esto se debe a que fue escrito por un grupo especial de personas que alcanzaron las diez más altas Sefirót en Máljut del mundo del Infinito.

La reunión especial de estas diez personas se produjo hace aproximadamente 2000 años. Nueve estudiantes junto con su maestro Rabí Shimón se retiraron a una cueva en el norte de Israel. Se quedaron allí y estudiaron.

Esta cueva es un lugar muy especial. Cuando mi maestro Rabásh y yo íbamos a Tiberias, a menudo visitábamos esta cueva. A Rabásh realmente le gustaba estar allí. Se quedaba durante unos minutos, y parecía como si estuviera en otro lugar, como si él dejara su cuerpo. Esa es la medida en la que se conectaba con la fuerza espiritual de las diez Sefirót, de las diez almas que estaban sentadas en esta cueva, mientras revelaban el mundo del Infinito.

Al conectarse juntos alcanzaron todos los 125 niveles espirituales, desde nuestro mundo hasta el mundo del Infinito. Baál HaSulám escribe en la Introducción al Libro del Zohar” que el alto nivel de alcance por un grupo de personas se produjo una sola vez en toda la historia porque ellos se unieron y estudiaron juntos.

Sólo en la corrección final (Gmár Tikún) seremos capaces de alcanzar el mismo nivel que fue alcanzado por este grupo, y seremos capaces de hacerlo gracias a su unificación. Ellos escribieron en el Libro del Zohar cómo fueron ellos capaces de unirse, qué ocurrió como resultado, y qué fue revelado en la conexión entre ellos. Ahí yace todo el poder de El Libro del Zohar.

Y claramente este Libro puede darnos la mayor fuerza de la corrección de nuestras almas. Es por eso que este libro es tan importante.

M. LAITMAN

viernes, 8 de abril de 2011

TODOS SOMOS UNA SOLA ALMA

En principio, tenemos que tratarlos a todos como partes de nuestra alma. De esa manera tengo que pensar en todos, incluso en los más grandes villanos. Ellos están fuera de mí en el mundo, porque todos estos deseos y cualidades dentro de mí todavía no están corregidos. Por lo tanto, externamente tengo que tratarlos con tolerancia, entendiendo que éste es el camino de la corrección. Llegará el tiempo en el que ellos también se unirán a este camino.

El alma común, la única criatura creada se compone de muchas partes. Algunas son más importantes y algunas son menores, al igual que en nuestro cuerpo físico, el cual está construido exactamente de acuerdo con la estructura del alma.

El alma también tiene una parte llamada, “cuerpo”, que es el deseo común que está dividido en muchos sistemas y subsistemas: el cerebro, el corazón, el hígado, los riñones, y otros sistemas importantes que están interconectados y sin los cuales el cuerpo no podría existir. Algunos de estos sistemas pueden ser recreados artificialmente, pero tienen que estar presentes en el cuerpo. Por otra parte, hay sistemas que no necesariamente tienen que estar presentes en el cuerpo, por ejemplo, las extremidades, músculos y huesos.

El alma común tiene partes que son particularmente importantes, el cerebro y el corazón, así como aquellos que son menos importantes, pero siguen siendo necesarios para la existencia. El cerebro y el corazón fueron corregidos en su mayoría desde Adám hasta nuestros días por el linaje de cabalistas que conocemos y de quienes estudiamos.

Ahora la fase de la corrección común se ha establecido en el momento en el que además del cerebro y del corazón estamos empezando a corregir los pulmones, los riñones, el hígado, el bazo, y así sucesivamente. Estas son partes importantes, pero menos importantes que el cerebro y el corazón. Las personas que estudian la Cabalá pertenecen a estas partes.

Todo el resto de la humanidad pertenece, por ejemplo, a los músculos, los huesos y extremidades, que son sistemas que no son necesarios para la existencia del organismo, pero son necesarias para su plenitud. Así es como debemos tratarlos y, en esencia ellos representan el 90% de toda el alma.

No pueden actuar de forma independiente. No pueden sentir un anhelo por la espiritualidad, sino que funcionan sólo de acuerdo con las órdenes que les llegan desde el cerebro y el corazón a través de nosotros, los diversos órganos importantes. Esto no disminuye su importancia, porque si estamos hablando de un alma común, entonces la ausencia de una célula diminuta, interrumpe la perfección.

Por lo tanto, todos son importantes y al final de la corrección cada persona es tan valiosa como todos. Esa es la ley de perfección de un sistema cerrado. Estudiamos este principio en el ejemplo de un sistema analógico: Tiene una entrada y una salida, y si algo se rompe dentro de él entonces no produce el resultado necesario.

Sin embargo, hay una diferencia durante el tiempo de corrección. Las partes que son más importantes son corregidas antes y las partes menos importantes se corrigen después de acuerdo con una jerarquía. Por lo tanto, no esperen que el mundo oiga y entienda lo que estamos haciendo, porque miles de millones de personas pertenecen a la parte pasiva. Ellos se unirán al proceso, porque verán que es imposible hacer otra cosa. De esta manera será corregido el mundo. La gente puede ser extraordinariamente inteligente o desarrollada, pueden ser grandes científicos, artistas y activistas culturales, sin embargo, estar completamente sordos a la espiritualidad. Así es como debemos tratar a todo el mundo.

Sólo aquellos que vienen al estudio de la Cabalá a través de diversos caminos pertenecen al interior del sistema. Por lo tanto, tenemos que valorar a cada persona aquí, porque fue elegida por el Creador para ser parte de un órgano importante del sistema común y por lo tanto un gran capital. Mientras tanto, otros podrían no ser tan importantes. Incluso los hijos de muchos cabalistas no tomaron el mismo camino, porque cada persona tiene su propio papel en el sistema y no se transmite hereditariamente. Así que armarte de paciencia.

M. LAITMAN

jueves, 7 de abril de 2011

COMO ME CORRIJO A MI MISMO?

Tengo 613 deseos y en total mi deseo actúa sólo por su propio bien. Esta es la situación en un principio. Entonces comienzo a separarme de ello “pieza por pieza”, comenzando con los deseos más fáciles y progresando hasta los más difíciles.

Así me corrijo a mí mismo, paso a paso, y en lugar de una parte del deseo egoísta, adquiero el deseo de otorgar. Mientras tanto, en el resto de mis deseos aun permanezco en la intención “por mi propio bien”. Así es como corrijo partes de mí.

Sin embargo, hay una condición: si he corregido al menos uno de mis deseos por el bien del otorgamiento, entonces el resto ya no pueden permanecer en la intención egoísta. Por eso tienen que someterse a restricción.

Tengo una gran vasija y al principio está dirigida completamente al beneficio propio. Primero que nada hago una restricción y sólo entonces soy capaz de transformar el primer deseo, el más pequeño hacia el otorgamiento a otros.

Así, tengo un gran deseo. Hago una restricción sobre este y entonces corto la más delgada capa de mí mismo. A partir de esa pieza, soy capaz de llevar a cabo el otorgamiento. Mientras tanto, una restricción reina sobre todos los otros deseos. Después corto la segunda capa, después la tercera, y así es como corrijo una tras otra.

No pueden existir dos deseos en una persona: uno dirigido hacia sí mismo y uno dirigido al otorgamiento. Después de todo, son opuestos. Para ser capaz de adquirir incluso el deseo más pequeño por el otorgamiento, todos los otros deseos tienen que ser restringidos.

(39945 – De la Lección 5, Convención WE! del 4/1/11)

ES POSIBLE AMAR AL PROJIMO?

Nuestra naturaleza es completamente opuesta al amor por el prójimo. Sólo me amo a mí mismo. Todos mis cálculos, conscientes e inconscientes, son construidos exclusivamente sobre el beneficio personal.

La forma en que me siento, la forma en que miro, la forma en que pienso, y lo que veo, todo esto es canalizado a través del filtro de mi egoísmo, dejándome solo las cosas que pueden beneficiarme o que representan una amenaza. Todo tiene que servir a mi bienestar personal. Esa es mi naturaleza.

Sin embargo, tengo que adquirir otorgamiento universal, el amor universal, la fuerza eterna del Creador, la vida eterna. Y para eso, necesito hacer ejercicios preliminares en el grupo. Por eso Rabásh continúa:

Amar a tu prójimo sólo es posible cuando te rechazas a ti mismo.

M. LAITMAN.

martes, 5 de abril de 2011

ZOHAR

El Libro del Zohar no deja a la mente nada para adherirse. En ocasiones, explica algo, o proporciona una pista, aun cuando no la necesitemos en especial. Al final, necesitamos un método llamado “la Torá” ya que la Luz que esta oculta nos reforma. Por lo tanto, no importa cuánto entiendas. No es el sagaz el que aprende. La inteligencia no juega un papel aquí.

Algunas personas escriben cada palabra, lo que es bueno mientras los ayude a conectarse a la fuente de manera emocional, en el deseo. Pero si todo está determinado por la mente, no vale la pena. No estamos en la universidad, y de los estudios por sí solos no aprenderás nada a menos que obtengas un deseo de otorgar, conexión con otros, y amor. Sólo esto te permitirá sentir el material ya que el hombre es un deseo, una vasija de sensación y percepción.

La mente en sí misma no tiene poder; es simplemente un medio para dirigir y reforzar el deseo.

(26597 – De la cuarta parte de la lección diaria de Cabalá del 15 de noviembre 2010, La esencia de la religión y su propósito.)

domingo, 3 de abril de 2011

Inteligencia en Acción

Rav Yehuda Ashlag, Baal HaSulam


Cada persona tiene el deber de alcanzar la raíz de su alma. Esto significa que el propósito al que aspira el ser creado es Dvekut (adhesión) con Sus cualidades. "Así como Él es misericordioso, etc..." Sus cualidades son las Sagradas Sefirot, y ésta es la Inteligencia en Acción que guía Su mundo, y por medio de la cual les otorga Su benevolencia y Su abundancia.

Pero, debemos comprender por qué esto se llama "Dvekut con el Creador", pues parece ser mero estudio. Lo explicaré por medio de una alegoría: En cada acto en el mundo, la inteligencia de su operador permanece en ese acto. En una mesa uno puede captar la destreza del carpintero y la habilidad en su oficio, ya sea mucha o poca. Esto se debe a que durante el trabajo él la fabricó de acuerdo a su inteligencia, con las cualidades de su mente. Y aquél que observa este acto y considera a la mente que quedó impresa aquí, está adherido a la misma mente que lo llevó a cabo. O sea que realmente se unen.

Esto se debe a que en realidad no existe distancia alguna o interrupción entre los objetos espirituales, ni siquiera cuando éstos se encuentran en cuerpos distintos. Pero la inteligencia en ellos no puede distinguirse, pues ¿qué cuchillo puede cortar lo espiritual y separarlo? Por el contrario, la diferencia principal entre los (objetos) espirituales está en sus cualidades - elogiables o criticables - y en su composición, ya que una mente que se dedica a los cálculos astrológicos no se adherirá a una que se dedica a las ciencias naturales.

E incluso dentro de la misma sabiduría hay muchas combinaciones, pues si uno excede a otro aunque sea en un solo elemento, esto los separa. Pero cuando dos sabios poseen el mismo nivel de sagacidad, el mismo nivel en esta sabiduría, están unidos de facto. ¿Pues acaso qué más podría separarlos?

Por lo tanto, cuando uno considera la acción de alguien y alcanza la inteligencia del sabio que la realiza, se encuentran ambos en el mismo nivel mental y potencial. De este modo están realmente unidos como alguien que se encuentra con un amigo muy querido en el mercado y lo abraza, lo besa y no es posible separarlos debido a su gran unidad.

Por lo tanto, la regla es que en el hablante la inteligencia es la fuerza que mejor se ajusta entre el Creador y Sus criaturas. Es considerada el medio entre ambos. O sea, Él confirió una chispa de esa fuerza, y a través de esa fuerza, todo retorna a Él. Y está escrito que "Con sabiduría los has hecho a todos ellos". Significa que Él creó el mundo entero con Su sabiduría. Así, aquél que es recompensado con alcanzar las acciones por medio de las cuales Él creó el mundo y sus reglas, se encuentra adherido a la Inteligencia que lo creó. Esto es, se adhiere al Creador.

Y esto es lo que quiere decir que la Torá es todos los nombres del Creador, los cuales pertenecen a los creados. Y por su propio mérito, la criatura alcanza la Inteligencia de Aquél que realiza todas las acciones. Esto se debe a que el Creador se encontraba mirando la Torá cuando creó el mundo. Y a través de la iluminación que uno alcanza cuando se apega a la Inteligencia de Aquél que está creando, uno se adhiere al Creador.

Ahora entendemos por qué el Creador nos ha enseñado las herramientas de Su arte. ¿Es que necesitamos crear mundos? Pero, de lo recién mencionado comprendemos que el Creador nos ha enseñado Sus acciones para que sepamos cómo adherirnos a Él. Y éste es el significado de "incrústate a Sus atributos".

significado de apegarse al creador o dios.

solamente si una persona posee un sincero deseo, recibirá ayuda desde Arriba. Y constantemente se le muestra en qué manera se encuentra en falta en su estado presente. O sea, se le envían pensamientos y opiniones que están en oposición con el trabajo. Esto tiene por finalidad hacerle ver que él no es Uno con el Señor. Y en la medida en que consigue sobreponerse, siempre ve de qué forma se encuentra más lejos de la Santidad que los demás, aquéllos que se sienten Uno con el Creador.

Pero él, por otra parte, siempre tiene quejas y reclamos, y no consigue justificar el comportamiento del Creador, y cómo Él se comporta con respecto a él. Esto le provoca dolor. ¿Por qué no es Uno con el Creador? Finalmente llega a sentir que no participa de la Santidad en modo alguno.

Aunque uno ocasionalmente recibe “despertar” de Arriba que le ayuda a revivir momentáneamente, enseguida después vuelve a caer al punto de partida. No obstante, esto es lo que lo lleva a descubrir que sólo Dios puede ayudarle y acercarle.

Un hombre siempre debe tratar de apegarse al Creador. Esto significa que todos sus pensamientos deben orientarse hacia Él; y que aun encontrándose en el peor estado, un estado del cual no pueda concebirse un mayor descenso, no debe abandonar Su dominio. O sea, no debe concebir que exista otra autoridad que le esté impidiendo entrar en la Santidad, y que sea capaz de causar beneficio o daño alguno.

Esto significa que no debe pensar que existe la fuerza de la Sitra Ajra (el Otro Lado) impidiéndole ejecutar buenas acciones y seguir la senda de Dios. En cambio, todo es llevado a cabo por el Creador.

El Baal Shem Tov decía que aquél que sostiene la existencia de otra fuerza en el mundo, o sea las Klipot (cáscaras), se encuentra en un estado de “estar sirviendo a otros dioses”. No es necesariamente el pensamiento herético el responsable de la transgresión. Pero si él cree que existe alguna otra autoridad y fuerza aparte del Creador, de esta forma él ya está cometiendo un pecado.


Rabí Yejuda Áshlag

sábado, 2 de abril de 2011

como ayudo a mejorar el mundo

La máxima ayuda es cuando el hombre todas las horas de su existencia intenta pensar sobre la corrección de sí mismo y del mundo.
Porque el rompimiento ocurrió primero en los mundos y después ocurrió el rompimiento de la única alma, y ahora estas almas quebradas se encuentran en el mundo roto. Y la corrección será posible sólo según la metodología de la Cabalá que nos ayuda a atraer la Luz Superior que cambia nuestra intención egoísta a la intención de otorgar